Después de los meses de confinamiento en casa, del “Resistiré”, de los aplausos a las 8 en los balcones, de los saludos en la distancia, de las actividades on-line que nos ha hecho traído la COVID-19, de los primeros paseos para ir conquistando de nuevo la ciudad, por fin llegaron las actividades de verano. También reducidas por las precauciones que hay que seguir teniendo la no propagar el virus, que sigue escondido entre nosotros.
Siguiendo los protocolos de actuación para minimizar el riesgo de propagación, la fundación desarrolla actividades al amparo del programa “Verano Joven 2020” de Excmo. Ayuntamiento de Salamanca con jóvenes con discapacidad.
Ya necesitábamos pisas las calles, visitar museos, hacer talleres, ir a la piscina o bailar, aunque sea respetando la distancia social y con la mascarilla. Ahora disfrutamos más de los ojos tan brillantes que tienen nuestros amigos, hemos aprendido a leer una sonrisa por las arrugas que hacen los ojos o la frente. Así que quedémonos con lo positivo y con el disfrute de estas actividades.
Os dejamos este vídeo de recuerdo de las actividades realizadas del 16 al 31 de julio