Un grupo de jóvenes valientes nos embarcamos para realizar un viaje a la historia, desde Egipto hasta Roma, visitando entre medias el Madrid más castizo.
Adelantamos un poco la salida para llegar con tiempo a la visita del Templo de Debod, algo inesperado en el centro de Madrid, donde traspasando unos jardines se levantan las majestuosas ruinas del templo. Visitamos sus salas y capillas, descifrando los jeroglíficos esculpidos en sus paredes. Puedes ver más información pinchando aquí.
Después de visitar el templo egipcio, tomamos el tentempie en los fantásticos jardines que lo rodean, con vistas a la catedral de La Almudena y al parque de atracciones madrileño. Allí fue, donde nos recogió el autobús para llevarnos al Mercado de San Miguel, muy cerquita de la Plaza mayor; " ¡Un mercado como el nuestro, de hierro y al lado de la plaza mayor!", decía David, "Muy colocado y bonito" decía Anita.
Si queréis encontrar más información sobre este mercado podéis pinchar en este enlace:
http://www.mercadodesanmiguel.es/
Desde el mercado, Nacho, el conductor que nos ha llevado muy bien, nos trasladó hasta la Plaza de los Cubos para comer. Como hemos hecho siempre, el menú fue una decisión personal de entre varias opciones que tiene dicha plaza. Tras el café visitamos unos puestos de pulseras, bolsos de cuero… de una fería de artesanía que había cerca y al volver, antes de subir al autobús… ¡sorpresa! nos encontramos con el actor que interpreta el personaje de "Gamboa" en la serie de televisión "El Barco". Muy simpatico aceptó hacerse una foto con nosotros y aunque le preguntamos por el final del próximo lunes, nos contestó que no podía decir nada, así que nos dejó con más ganas aún de ver el final de la serie.
Y de la plaza de lo Cubos nos dirigimos al Museo Arqueológico Nacional, allí nos esperaba Lula Hernández Diego, para enseñarnos el arte romano de los mosaicos, que curiosamente mucho tiene que ver con la cocina. Allí, después de conocer como se elaboraban los mosaicos y disfrutar viendo los que había en las salas, pasamos al taller donde Lula nos enseñó como se hace un mosaico y todos los que quisieron, se pusieron manos a la obra. Bueno, más que manos a la obra, diremos manos a la "tesela", que es como se llama a cada una de las pequeñas piezas que conforman el mosaico. Sin darnos cuenta, nos convertimos en "Mosaistas" y en un segundito (de una hora y media) cada uno se llevó su mosaico. Aunque hay que acabarlo en casa y quedamos que yo colgaba la forma de finalizarlo en esta página web.
Instrucciones a seguir:
Todos lleváis un paquetito que podemos desprecintar pero no quitar el papel, pues para ello haremos lo siguiente: pediremos en cada una bayeta, la humedecemos con agua lo más caliente que aguantemos y la colocaremos encima del papel que recubre el mosaico. Lo dejaremos humedeciendo como 5 minutos y después retiraremos el papel con cuidado. Posiblemente a algunos les haya quedado parte del cemento por encima de las piedras, por lo que, pediremos un estropajo o cepillo de uñas y humedeciéndolo, frotaremos hasta quitar el cemento y asi nos quedaràn las piedrás relucientes y bonitas. Para que lo podáis seguir o repetir, aunque los materiales no sean Italianos como estos, aquí podéis seguir todos los pasos. Pincha en PASOS A SEGUIR.
Desde esta página web, damos las gracias a todos los que han hecho posible este Viaje a la historia y en especial a Lula, por su amabilidad, sensibilidad y paciencia. Esperamos verte por Salamanca.
Un saludo y espero sacar un ratinin para colgar un vídeo con más fotitos.
Las personas con discapacidad tienen los mismos derechos a disfrutar del turismo y del ocio en época de vacaciones. Además, han de ser ellos mismos lo que elijan dónde, cuándo y con quién quieren hacerlo.
